TE PIENSO
¡Qué diminuta
es la vida!
¡Qué incomprensible!
¡Qué ajena!
¡Pensar
que amé tanto
con ojos de niña
asombrada!
Y hoy que mido
el tiempo
transcurrido,
y penetro
en este enorme
pensamiento
que es la vida,
me hastío
de este quebranto
y contemplo
con ojos viejos,
la inmensidad
de este misterio.
Y me pregunto
llorando quedo,
¿para qué vivo?
Y porque amarte
es mi más perseverante
secreto;
ausculto tu mirar
distante,
sereno;
y recostando
mi rostro reflexivo,
surcado de años,
te pienso...
y resignadamente
entiendo
para qué vivo.
Dedicado a mi amado Señor Jesús
De mi poemario
"Ciento cincuenta poemas del alma"
Derechos reservados
Safe Creative Cta. 1006080193112
Vivir para amar es vivir dos veces. Un abrazo, Ingrid.
ResponderBorrarGracias Pedro por tu bella respuesta. Si, vivir para amar es lo más lindo. Un abrazo.
BorrarMe ha parecido precioso el poema. Espero que hayas pasado un bonito día de navidad. Abrazos y gracias por tus palabras.
ResponderBorrarGracias Teresa por asomarte a mis versos y apreciarlos. Si, a Dios gracias pasé una noche bonita de navidad. Un abrazo.
ResponderBorrarQue hermoso poema. Vivir para amar.... Saludos amiga.
ResponderBorrarGracias estimada Sandra por visitar mis versos y dejarme tan grata huella. Un saludo fraternal y que tengas un feliz año 2,021.
ResponderBorrar