Duetos con amigos



O QUE LA POESÍA ES



(Dueto entre "Tarde gris" ...Blanca García
e Ingrid Zetterberg)



Nacer
como alta espiga,
como verde milagro
en el árido suelo;
ser agua clara
y profunda
en la fosa más oscura.


Descargar mis sentimientos
al abrigo de las letras
descubriendo que con eso
se aligeran las maletas
de la casa de mis sueños,
sin mis penas y tragedias.


Volar muy alto
y ahondar en la luz,
cruzar un puente
hacia la vida,
buscando al Creador,
sembrando la semilla.


Lavando los pesares
en versos hechos promesas,
como manantial que observa
la crecida de sus hierbas
entre flores y colores,
y la esencia que subleva.


Sufrir,
y navegar más allá
de los mares,
vislumbrando en la noche
una imposible orilla,
y dolorosamente regresar.


Oh poesía bendita,
que cubres mis oscuros peldaños
con la luz que inevitable
me lleva de la mano
a palpar este milagro
del amor a tu existencia.


Rescatar al alma
de la piedra
y del bullicio,
de la sombra que esclaviza,
apartándose del mundo
hacia el áureo camino
de mi blanca poesía.


Ingrid Zetterberg de Perú y Blanca García de México



STED Y YO

Dueto entre los poetas
Ingrid Zetterberg
y Roberto Tavares en el foro Mundo Poesía en
el año 2,009.





Usted entre versos y doradas
gotas, usted y las rosas
de rocío cuajadas,
usted y las cartas
de esperanzas rotas, usted
y el silencio de las madrugadas.



Usted y sus palabras
que traspasan mi vida.
Usted y yo, inesperado encuentro
de dos almas. Poetas de sangre.
Usted y el dolor de lo que se ha ido,
usted y ese llanto
que ya no esperaba.
Le ofrezco mi canto
como dulce daga.



Yo por mi parte le ofrezco
mi oído como desatino,
y el verso que siento latir
por mi pecho,
le envuelvo mi alma
ahita de sueños,
sembrada de ansías
y desconsuelos, como prenda
afable de mi vida quieta,
que ahora despierta
al leer tan sentidos escritos
de su puño y letra.
Y si fuera que al verme
llenito de anhelos,
usted me comprende
y me justifica,
le ruego mi amiga
que usted de alegrías
me toque la puerta.



Usted y yo, como dos niños
que se asoman a la fuente
de las aguas perfumadas,
que mana en su vertiente
la pureza de los versos.
Usted que alcanzó
las hondas fibras del misterio
con sus letras,
y yo que descorrí el velo,
descubriendo mi tristeza.
Usted y yo, almas afines,
que dejamos fluir música
en las palabras,
y detuvimos las madrugadas
en el cantar que atravesó
nuestras ventanas.
Volvamos en quietud
hacia la luz
que rozó nuestras manos,
e inspiró nuestro canto.
La luz de Aquel
que nos anda buscando.



Como un volver a la infancia
feliz,
así lo ha descrito,
que yo me imagino de usted
y su canto, un sueño veraz,
ataviado de flores,
que en la quietud se desprende
y da muestra
que aún en penumbra
ya alumbra,
y que aún de noche
ya asoma en dos corazones...
un nuevo horizonte.
Usted es un cuento feliz
para mis dolores,
por eso, yo dejo que un verso
dibuje en suspenso...
mis emociones.
Mientras más leo, más
me fascino.
Y mientras miro el ámbar
del día, me doy cuenta
que me ha conducido,
a la luz de Aquel que da paz
y lo es TODO,
y hallando esa paz
tan serena,
el alma se acuesta
a sabiendas
que existe alguien
que la comprenda.



Usted mi amigo,
el de las palabras dolidas,
el de la ilusión plena,
cada hoja derramada
del árbol de los años,
se llevó esperanzas viejas,
y arrastró canciones nuevas
hasta el umbral
de nuestras puertas.
Una mirada de luz
le abrirá a usted
la desconocida senda,
una ruta iluminada
que hace tiempo yo conozco
y que me embriaga.
En esa senda
hay unas huellas laceradas
que le invitan a usted
a continuar con valentía.
Usted y yo
llevamos en el alma
el don de poesía,
regalo dichoso de Aquel
que más nos ama.
Usted amigo, hermano,
cuya tristeza es mía,
deberá saber que
no hay desencanto ni dolor,
cuyas manos heridas
no puedan sanarnos.



Yo quiero en un sueño
volver a encontrarla,
yo quiero mirar de la luz
sus colores,
yo quiero olvidar
los antiguos dolores,
que me cambien por paz
la voraz soledad
de mis decepciones.
Es decir,
la ilusión convertirla
en vivencia,
y así renovado
hallar en usted
mi mejor poesía,
por eso mi amiga
como lo que a usted
ahora le inspiro,
seca mi llanto,
lo que usted me describa
yo se lo canto.



Ingrid Zetterberg de Perú y Roberto Tavares
de México




L AMOR PREVALECE




(Dueto en la modalidad de cartas) Dueto entre
el escritor Beto Brom y la poeta Ingrid Zetterberg)



Lunes, 24 de febrero, día gris


Querida Palomita,


Imagino una sonrisa de asombro en tu rostro,
al recibir estas líneas. Si, han pasado tres largos
años desde mi despedida, no deseada pero necesaria.
Conocí tierras lejanas y extrañas, bogué por ríos
peligrosos y conocí lugares de ensueño.
Quise olvidarte, apartar nuestra relación de mis
pensamientos...fue en vano, hice lo imposible para
lograrlo, sin resultado positivo. Escenas de cariño,
momentos que fueron inolvidables, golpeaban y golpean
aún; permanezco apabullado, mis sentimientos no me
otorgan sosiego. Es muy fuerte la lucha en mi interior;
quiero volver, necesito regresar, ruego que me entiendas.
No sé si este mensaje llegará a tus suaves manos, quedo
esperanzado que así sea. Contéstame te lo pido!!!


Tu Halcón



Martes, 4 de marzo


Mi recordado Halcón:


En este verano inacabable, en que me hallaba
abanicándome en mi acostumbrada hamaca, debajo de las
acacias de mi patio, justamente tocó la campana de la
entrada, mi estimado amigo el cartero.
Y heme aquí, con esta sorpresa que ya no esperaba:
Una carta tuya, (que aún guardo bajo mi corpiño), un
tanto ajada, de tanto leerla y releerla.
Pero ¿sabes? tus letras han sacudido la afable quietud
de mis días. Y no es que yo te hubiera olvidado, pero
nuestro antiguo idilio se había adormecido entre cálidos
atardeceres; y el frío de tres largos inviernos, que
ensombrecieron mis mañanas. ¿Y qué más puedo decirte?...
Quizás nada, excepto que cuando escribo estas líneas,
las letras se van tornando borrosas por la humedad de
mis lágrimas. Y tiembla mi mano mientras sostengo la
pluma, mi recordado amigo...y no puedo explicarme el
porqué.


Paloma



Jueves 13, noche estrellada.


Palomita,


no salgo de mi asombro y alegría, ¡Recibir noticias tuyas!
una carta de tu puño y letra; la fortuna ilumina mi
camino, aún recuerdas nuestros momentos, aquellos instantes
inolvidables en los que dejé mi corazón a tus pies y sin
embargo no pudieron continuar; el cruel destino tenía otros
planes. Pero reitero mis pretensiones, no sé hasta que
punto será posible concretar nuestro reencuentro, el cual
anhelo con todos mis sentimientos. Miro hacia el cielo, y
entre las miles de estrellas creo reconocerte...si,
no me equivoco...allí estás, eres la más refulgente, la
que se destaca, palpo tu titilar, ahhh...amada mía.


Aquí tu Halcón


Viernes 21 de marzo


Querido Halcón:


Yo también estoy gratamente sorprendida por esa insistencia
en reencontrarnos. La vida te llevó muy lejos, hacia otro
puerto y otro mar, hacia campos de escarcha, que no conocen
mis pisadas. Y aquí me quedé entre brumas, y tardes de
silencio. Y la puesta del sol que solíamos contemplar
juntos, ya no parece igual. Crepúsculos en agonía, con un
sol cansado
a cuestas, y aves que trinan su despedida, pero ya no le
susurran nada a mi alma solitaria. Y hoy que vislumbro tu
regreso, un escalofrío lento recorre mi espalda; y mi
corazón se apresura y late con fuerza recordando tu querer.
A Dios le doy las gracias por estas nuevas alegrías que
se avecinan a mi vera. Y ya sueño con la plenitud de tu
risa en un nuevo amanecer. Aún te amo, aún te espero.


Tu Paloma

Lunes 31 - madrugada naciente.


Mi dulce Palomita,


una noche más en mis cavilaciones, desde que llegó tu
última carta, noches y días mezclan sus horas; olas de
recuerdos se unen a un futuro cercano que ocupan mi mente,
ansío el momento de estrecharte entre mis brazos. En unos
días más, no muchos, me embarcaré, el destino uno sólo..
tu morada, no desesperes, mi llegada ya es una realidad,
de sólo pensarlo tiembla mi cuerpo, la dicha, tanto
tiempo anhelada, florecerá como flor en primavera.
Mi amor para ti.

Tu Halcón



Martes 8...En el atardecer.


Querido Halcón:


Siento una grande ilusión que se va apoderando de mi
ser. ¡Y hace tanto tiempo que no vivía tan dulces
emociones! Y es que cada vez que llega el cartero, mi
corazón zapatea, y me invaden oleadas de alegría.
Estoy plantando nuevas flores en mi jardín; algunas
violetas y crisantemos. Y en un rincón de mi patio he
colocado un mediano arbusto de jazmín, y ya perfuma la
brisa por las noches, y alcanza con su aroma el umbral
de mi casa. Todo lo he preparado pensando en tu regreso.
Cada día amanezco con regocijo, y me digo a mi misma:
¿No será esto un sueño? ¿esta dicha repentina? Pero
luego me sonrío y siento que todo resplandece a mi
alrededor. ¡Tú ya vuelves!...¡Oh realidad bendita!


Tu Paloma


Viernes 18, día lluvioso y frío


Oh...mi Palomita,


Leí y releí tu carta, el regocijo invadió mi corazón,
ya está pronto a ofrecerte todo mi amor. Poseo el
billete del embarque, será dentro de una semana,
confirmado, y si no ocurre nada imprevisto, partiré
para encontrarte y abrazarte...
Lo escribo, y no lo creo, tanto tiempo anhelé esto, me
parece imposible, pero no, no es un sueño, es la pura
y deseada realidad. El día anterior a mi partida te
escribiré mi última carta, no te molestes en responderla,
pues estaré navegando hacia tus costas.

Todo tuyo, tu Halcón



Sábado 26...clima cálido


Amado Halcón:


¡Si supieras! Aquí hace un calor tremendo ya que el
verano está en todo su apogeo. Te aconsejo que traigas
ropa fresca, para que estés cómodo. Ya tengo preparado
todo en la casa. El jarrón de porcelana inglesa que
tenía guardado, lo he colocado en el centro de la mesa
del comedor, que ya está cubierta por un fino mantel
bordado, que encontré a buen precio. He pintado de
colores alegres las macetas del patio. ¡Todo está bello!
Y pensando en ti quité mi antigua hamaca; que pendía de
las acacias y coloqué una más ancha de hilo trenzado y
grueso, que lleva flecos de color marfil.
Pienso que allí entraremos los dos para recibir la fresca
brisa del atardecer. Y también desde allí contemplar las
estrellas en estas tibias noches de verano.
Tu carta me ha tranquilizado; y ya sé que no debo
escribirte, pues en una semana más estarás surcando los
mares hasta llegar a mis brazos.
Te espera y te sueña,


Tu Paloma



Viernes 25...Día de sol pleno


Palomita, palomita mía,


Con seguridad nuestras cartas se cruzarán en el camino;
en unas pocas horas caminaré hacia el puerto, no salgo
de mi alegría, cuantas horas pensando en ti, un poco más
y me tendrás entre tus brazos...Ya voy para allí, ya llego..
¿Estarás en el puerto a mi llegada?
Todo mi amor para ti,


Halcón


Ingrid Zetterberg
de Perú
y Beto Brom de Israel


ECUERDOS DE OTOÑO



(Dueto entre los poetas Ingrid Zetterberg

y Ángel Francisco)


Recuerdos que se agolpan en el alma
en este otoño en sombra
en que tu rosto amado
acaricia mi nostalgia.


Ausente siento aún tus palabras
aquella voz que no se apaga,
silencio latente en mis mañanas
ya no inspiras los versos, musa adorada.

Tu mirar lejano
quedó en el tiempo
flotando
como melodía celeste.


Cenizas divisas muy de mañana
llevado por el barco de la añoranza,
malsano el tiempo que dibujaba
aquel otoño, que tanto ansiabas.

Y comprendo bien amado
que no puedo perderte
y mis manos se extienden
detrás de tu voz y tu silencio.


Que comprendas no era mi intención
ni ser exclusivo en tu eterno balcón,
quizás tus manos toquen mis recuerdos
pero mi alma se pierde...en sus lamentos.


Ingrid Zetterberg de Perú y

Ángel Francisco de España


N IDILIO POR INTERNET




Dueto entre los poetas Ingrid Zetterberg y Fernando Alvarez (Lautaro)



Apareciste como de la nada
disfrazada de un nick muy misterioso,
simpatía nos unió en ese instante
y brincó mi corazón cual fuese un oso.

Tus palabras me llegaron desde lejos
escondidas y vestidas de tu calma,
y sin saber la forma de tu rostro
descubrí las maravillas de tu alma.

Enjugo mis lágrimas amigo,
pues me siento emocionada
al iniciar este diálogo contigo,
ya que a la soledad estoy acostumbrada.

Y hablando francamente,
tus palabras vienen enlazadas
al color de la esperanza
en el cual me sumerjo ansiosamente.


No llores más,
aunque esté yo en la distancia
muy cercana tu estás en sentimiento,
tus palabras se deslizan por mi alma
y al amor ya le ponen nuevo aliento.

Y si esperanzas guarda aún tu corazón
el mío se conserva en yerba verde,
tus palabras lo alimentan de ilusión,
la esperanza en la vida no se pierde.

Bendito el día en que se juntó
mi corazón con el tuyo,
pues me deleito ya en las aguas
perfumadas de este amor
que va naciendo como un rosado capullo
bañado por el rocío del albor.

Eres mi ilusión que nace
cual una flor temprana,
que yo voy regando con mis versos
al iniciar cada mañana
esta mutua conversación
que es mi embeleso.


Jamás pensé que otra vez mi corazón
volvería a latir fuerte en mi pecho
y un encuentro tan casual por internet
llevaría hacia el amor, rumbo derecho.

Y si sientes también algo por mí
es la hora de viajar donde tú estás,
pues no puedo indiferente estar así,
necesito de tu amor y de tu paz.

Yo también siento que ya es tiempo
de conocernos.
Me invade una tierna emoción
y se hacen largos los días para el encuentro.
Mañana mismo te enviaré mi dirección.

Yo tampoco pude nunca imaginar
que por este medio naciera un dulce amor,
que ya pronto vamos a saborear
transportados en las alas de la ilusión.


Ya es la hora y ha llegado el día,
por fin te encuentro, eres tan hermosa
tal cual mi alma ya te presentía,
eres mujer tierna y deliciosa.

Quiero que para siempre seas la musa
de mis versos y cariño confidente,
y vivir atrapado en este amor
en los años...en el tiempo...para siempre.

Dichosa mi alma, pues al fin puedo verte.
Eres tal como te soñaba,
con tu mirada chispeante y sonriente,
y la voz cariñosa que yo anhelaba.

Has llegado a mi vida solitaria
como bajado del cielo, así de repente
a llenarme de alegrías inesperadas
y como tú mismo lo has dicho, para siempre.



Ingrid Zetterberg de Perú y Fernando Alvarez..(Lautaro)de Chile


IME AMIGA



(Dueto entre las poetas María Comorera
e Ingrid Zetterberg)


Dime amiga mía, cuando el amor
se va lejos porque ha terminado,
o ha fallecido,
¿cómo se hace para que no hierva de dolor
esa herida en carne viva?

¿Es cierto que al morir
te conviertes en un astro brillando?
A veces contemplo el firmamento,
pero no hay luceros,
no hay brillos ni reflejos,
todo está oscuro y muy negro,
ni la luna se asoma
y yo pienso que el cielo
me está castigando.

No, no es castigo...
es apenas el destino
empujado por un viento amargo,
desconocido
para llevar un mensaje
sombrío
al ángel de la muerte;
y decirle muy bajo al oído:
"Penetra en esa casa
y posa suavemente,
permaneciendo escondido
por un tiempo
entre aquellos dos palomos
hasta culminar tu obra".
No es cierto que nos tornemos
en luceros
cuando a la otra orilla cruzamos;
es más probable
que permanezcamos
muy unidos aún,
a quien más amamos...
y en el fondo de nuestro espíritu,
nos duela su llanto.



María Comorera de España
e Ingrid Zetterberg de Perú


VECES LA VIDA ES DURA





(Dueto entre los poetas Ingrid Zetterberg

y Jesús Quintana)





La vida a veces se impone y nos aleja,

de obtener todo lo que una vez soñamos,

nos da otra opción, como una vía paralela,

y antes de que se cumplan, despertamos.

No esperemos mucho de la vida, amigo...
es como un juego cruel
en el que van bogando
nuestros sueños.
Es una estrella rutilante
que finalmente se apaga.

Si el trueno desatara al fin tu recuerdo,
hurgando impulsos a mis ansiedades,
te dijera, no salgas de casa, hoy está lloviendo
si sales el día será de lágrimas y soledades.

Pero no temas,
aunque truene o llueva,
tu recuerdo y el mío
irán por siempre
enlazados.

Y si te quedas en casa quizás por fin tú leas
los versos que por ti he dejado escritos,
si no huyen, humo azul, por chimeneas,
o arrastra el viento, pétalos marchitos.

Tus versos anhelados
los he de rescatar
aún del humo y el fuego,
porque pertenecen
al meollo de mi alma.

Si abres mis libros, y al leer no rastreas
el alma que te amó, que aún te habla a gritos,
si ni ves la tuya, que trazó mi mano,
todo cuanto escribí, lo escribí en vano.

¡Cómo no descubrir
tus letras,
que como aves huérfanas
en mi regazo aletean!
¡Cómo no rescatar
el gemir de tu alma
en tus libros amados!

Porque sin tu saberlo caminas a mi ritmo
por calles sin pasión, que no alcanzaron,
a tener ningún sentido, ningún realismo,
y que sólo en un frío barranco te lanzaron.

Si, tú bien lo has dicho,
yo soy parte de tu vida,
de tu andar profundo
por calles desoladas,
que como valles oscuros
nos conducen al abismo
de la nada.


Ingrid Zetterberg de Perú y Jesús Quintana 
de Cuba


MOR


Dueto entre las poetas
Ingrid Zetterberg y Bethzaida Montilla


Amor es perdonar regalando una flor
y dar una sonrisa sin ningún rencor.

Amor es un juguete detrás de una vidriera
la mirada triste de un niño que está afuera

Amor es contemplar de día las estrellas,
y sentir q·en las noches nos alumbra el sol
Amor es la mirada q· entre miles de gentes
se queda para siempre en nuestro corazón.

Amor es sonreirle a un niño q· nos mira
detrás de los cristales de la confitería.

Y es vivir de la vida los detalles pequeños
es llorar en silencio, es conversar con Dios


Amor es besar con nostalgia
la tierna muñeca
de la nieta ausente.

Es derramar lágrimas
al escuchar una melodía de flauta
que nos traspasa el alma.

Amor es entender el lenguaje
de un perrito callejero
que nos mira hondamente.

Es sentir compasión
por todo ser vivo
que está sufriendo.

Amor es percibir la soledad
de un árbol sediento
que implora en su silencio.

Es elevar una oración
por aquellas madres
que tienen un hijo en el cielo.

Amor es ver a Dios
en la transparencia de las aguas;
es vibrar con su perdón.


Ingrid Zetterberg de Perú
y Bethzaida Montilla de Venezuela



















No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Amigos y visitantes estimados, les agradeceré me dejen algún comentario, ya que estos me sirven de mucho incentivo.

Entrada destacada

¡A mis años!

¡A MIS AÑOS! (Rima Jotabé heptadecasílabo)....Consta de 17 sílabas métricas cada verso) No hay amor más puro que aquel que ...